Mantenerse competitivo en el mercado y con niveles óptimos de producción, productividad y calidad requiere que las empresas realicen inversiones oportunas en infraestructura y tecnología de avanzada o de punta. Es así como en la nueva visión empresarial, no solo la infraestructura, que comprende las instalaciones, estructuras y servicios básicos, sino también la tecnología y el recurso humano - se necesitan individuos para el funcionamiento de la maquinaria y otros aspectos operativos, administrativos y de comercialización- son partes esenciales para hacer andar eficientemente el negocio. Sin descuidar la inversión en infraestructura básica, ya que una empresa requiere expandirse y modernizarse cuando entre sus planes está lanzar un nuevo producto o servicio o adoptar un nuevo proceso, las compañías están dedicando parte importante de sus propuestos a la innovación y adecuación tecnológica, debido a que deben estar preparadas para enfrentar la fuerte competencia en los mercados